¿En qué consiste una cirugía de próstata?
La cirugía de próstata es una operación de mínima invasión que se utiliza para aliviar los síntomas urinarios moderados a graves provocados por el agrandamiento de la próstata.Conforme el paso del tiempo la próstata crece o se agranda lentamente, esto puede ocasionar diversos problemas como el ejercer presión sobre la uretra y hacer que el flujo de orina pierda velocidad y fuerza. Esto puede llegar a ser tan severo que a veces es necesario realizar una cirugía para desobstruir y liberar el flujo de orina y así evitar consecuencias como la disfunción del riñón.
El 95% de las cirugías de próstata son de mínima invasión y la mayoría se realizan con distintos tipos de energía, entre ellas la láser. La cirugía de próstata con láser es un procedimiento en el cual se introduce una pequeña fibra por el conducto de la orina (uretra) y a través de esta fibra se transmite una energía de alta potencia que vaporiza selectivamente el tejido prostático de manera rápida y efectiva.
¿Qué ventajas trae la cirugía de mínima invasión?
La cirugía láser como con otro tipo de energías mínimamente invasivas puede ofrecer varias ventajas como:
- Menor riesgo de sangrado. La cirugía láser puede ser una buena opción para los hombres que toman anticoagulantes o que tienen un trastorno hemorrágico que no permite que la sangre coagule normalmente.
- Ausencia de estancia hospitalaria o una estancia más breve. La cirugía con láser se puede realizar en forma ambulatoria o con una sola noche de estancia hospitalaria.
- Recuperación más rápida. La recuperación de la cirugía con láser suele llevar menos tiempo que la recuperación de una resección transuretral de la próstata o una cirugía abierta.
- Menor tiempo con sonda. Los procedimientos para tratar el agrandamiento de la próstata suelen requerir el uso de un tubo (sonda) para drenar la orina de la vejiga después de la cirugía. Con la cirugía con láser, por lo general, la sonda se necesita sólo 24 horas.
- Resultados inmediatos. La mejora en los síntomas urinarios con la cirugía láser se puede observar inmediatamente. Con los medicamentos, pueden pasar semanas o meses antes de poder observar una mejoría notoria.